Encuentros virtuales en vivo: Sábado 17 de junio, 13:00 EDT

Esta vez fue un muy pequeño grupo desde Nueva York, Argentina, España. 

Leímos un poema de Carmen Martín Gaite, “Certezas”. Lo expusimos en primer lugar sin título. 

Es un poema muy irregular, sin ritmo. Sin una estructura clásica. En el poema se expresa una historia, la voz ha perdido su libertad, está encerrada y espera estar encerrado. Pero sabe por dónde quiere ir. Se menciona que se señala al horizonte que es algo inalcanzable. 

Un elemento curioso es que, al no poner el nombre del autor y el título hemos asumido que era una voz de hombre. Recordamos experiencias propias que nos despertaba en el poema.

Al poner el poema descubrimos nuevas cosas. Analizarla sin conocer el titulo nos ayudó a reflexionar más profundamente en las palabras.

Hablamos de estar encerrados y de escapar. De quién tiene las voces.

La propuesta de escritura versó sobre “escribe sobre a dónde quieres ir”.

Escribimos sobre la idea de ir a algún lugar. Escribimos sobre si debemos ir a un lugar o a un tiempo, un momento. Vamos a momentos vitales, no a lugares. Escribimos sobre visitar a personas que ya no podemos visitar. Escribimos sobre ir a poniente, al horizonte.

Aquí, ahora alentamos a los participantes que, si así lo desean, compartan lo que escribieron a continuación. Deja tu respuesta aquí, si deseas continuar la conversación sobre el poema de Carmen Martín Gaite, “Certezas”. Pero antes, les recomendamos tener en cuenta que el blog es un espacio público donde, por supuesto, no se garantiza la confidencialidad.

Por favor, únase a nosotros en nuestra próxima sesión en español: El sábado 8 julio a las 13 hrs. o a la 1 pm EDT. También, ofrecemos sesiones en inglés. Ve a nuestra página de sesiones grupales virtuales


«Certeza» de Carmen Martin Gaite

Habéis empujado hacia mí estas
piedras.
Me habéis amurallado
para que me acostumbre.
Pero aunque ahora no pueda
ni intente dar un paso,
ni siquiera proyecte fuga alguna,
ya sé que es por allí
por donde quiero ir,
sé por dónde se va.
Mirad, os lo señalo:
por aquella ranura de poniente